El diseño del mango permite mantener levantada la cabeza del utensilio resistente hasta 210 grados centígrados. No raya ni daña la superficie antiadherente de las baterías y sartenes. Ideal para sacar del sartén y escurrir aceites y salsas utilizados para la cocción de los alimentos, tales como: papas fritas, huevos fritos, albóndigas, y otros.